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te sé

te sé querer con los ojos cerrados,

a ti 

y a tus ojos de caballo;

porque así soy

porque así eres

*

gerberas

y es que son mis flores favoritas

sí

y es por la forma en que

dejas el café

sin terminar;

y es por la manera

en que tus manos 

se curvan;

y es por como 

se sienten 

tus besos;

sí, 

es por todo eso

*

Je ne sais pas

Je ne sais pas, je ne sais pas, je ne sais pas

*

plegaria

ruega por nosotros

escucharte

a veces 

no dices nada

pero

yo quiero escucharte

decir mi nombre

*

AlexKanevsky

J.F.H. with her Portrait

Twins bath

K.B. in her bathroom

Lunch

J.W.

...

a veces no hay nada que decir 

*

déjame soñar

Ocurre que la realidad es superior a los sueños. En vez de pedir "déjame soñar", se debería decir: "déjame mirar".

Juega uno a vivir.

Jaime Sabines

Eric Fischl

the bed, the chair, jetlag, 2000

the welcome, 2007

bathroom scene 1, 2002

que rico que es el azul

*

blackbird

Cronopio cronopio II.

Los cronopios asumen el mundo como algo que necesariamente debe ser roto por una pelota, 

o por un beso.

agradecimientos cabales al cronopio Verde Agua

chocholate milk

i love chocolate milk,

i'm going to get old 

really old 

but i'm going to keep drinking chocolate milk

*

viens avec moi

así

quizás me ves...

Autonecrología
Jaime Sabines

Te quiero porque tienes las partes de la mujer

en el lugar preciso

y estás completa. No te falta ni un pétalo,

ni un olor, ni una sombra.

Colocada en tu alma,

dispuesta a ser rocío en la yerba del mundo,

leche de luna en las oscuras hojas.

Quizás me ves,

tal vez, acaso un día,

en una lámpara apagada,

en un rincón del cuarto donde duermes,

soy una mancha, un punto en la pared, alguna raya

que tus ojos, sin ti, se quedan viendo.

Quizás me reconoces

como una hora antigua

cuando a solas preguntas, te interrogas

con el cuerpo cerrado y sin respuesta.

Soy una cicatriz que ya no existe,

un beso ya lavado por el tiempo,

un amor y otro amor que ya enterraste.

Pero estás en mis manos y me tienes

y en tus manos estoy, brasa, ceniza,

para secar tus lágrimas que lloro.

¿En qué lugar, en dónde, a qué deshoras

me dirás que te amo? Esto es urgente

porque la eternidad se nos acaba.

Recoge mi cabeza. Guarda el brazo

con que amé tu cintura. No me dejes

en medio de tu sangre en esa toalla.